¡No permitas que la voz del miedo gane!
por Jonathan Roca Figueroa
¿Por qué hay personas pesimistas sobre la tecnología? Una razón valida es que las personas le tenemos miedo a casi todo. En el sitio web Pessimists Archive™ que documenta la historia de la tecnofobia y los pánicos morales, sitio en el que podrá encontrar recortes de los principales medios de prensa del mundo, de las muchas veces que políticos, padres de familia y los estados repudiaron las tecnologías que hoy son parte de nuestras vidas. Pessimists, nos enseña que “el mejor antídoto contra el miedo a lo nuevo es mirar hacia atrás, al miedo a lo viejo. Solo mirando hacia atrás a los temores de las cosas viejas cuando eran nuevas, podemos tener debates constructivos racionales sobre las tecnologías emergentes de hoy evitando las trampas del pánico moral”.
Hagamos un repaso histórico y resumido para nuestro lector/a
- Cuando la bicicleta debutó en el siglo XIX, se la culpó de todo tipo de problemas. Algunos médicos, políticos, economistas y misóginos decían que la bicicleta volvería locas a las personas, promiscuas a las mujeres, devastaría las economías locales y causaría deformidades físicas de la columna vertebral y la cara (Pessimists Archive, 2023). Hoy ninguna familia piensa despectivamente de la bicicleta y es más desean que sus hijos/as aprendan a manejar una.


- En el siglo XIX, la música a menudo se tocaba en vivo o en instrumentos mecánicos como pianos y órganos. Cuando surgió la música grabada, fue tratada con desdén y menos elegante que la música en vivo, algunos dijeron que reemplazaría las canciones de cuna antes de acostarse. (Pessimists Archive, 2023)
- Hoy muchas familias desean que sus hijos lean más, pero en el siglo XIX se pensaba que las novelas llevaban a las mujeres jóvenes a buscar el riesgo y novedad, y a los hombres de ocasionar actos criminales violentos. (Pessimists Archive, 2023)


- En 1910 el humorista y novelista estadounidense Mark Twain denunciaba que las fotografías en casa debían ser reemplazados por más ventanas, alegaba que la belleza natural del paisaje era ignorada por la artificial fotografía (Pessimists Archive, 2023)
- Hoy en día la mayoría de nosotros usamos auriculares, nos los ponemos en público sin vergüenza, ni miedo a ser multados. Pero cuando los auriculares se infiltraron en la vida pública, las reacciones fueron desde la risa hasta el pánico moral. Para sus detractores era una herramienta de desconexión social y retraso intelectual. Un peligro en las carreteras, un enemigo para el aprendizaje y una amenaza para la salud. Hoy no solo escuchamos música, aprendemos idiomas, meditamos y sabemos más del mundo mientras viajamos en el bus camino al trabajo con nuestros sensacionales auriculares. (Pessimists Archive, 2023)


6. En 1984 la regla de cálculo fue reemplazada por las calculadoras electrónicas y computadoras. Algunos profesores, técnicos y científicos lamentaban su falta de uso y sentenciaban deficiencias en el aprendizaje. Cabría preguntarse ¿los actuales economistas son más deficientes por usar calculadoras modernas? (Pessimists Archive, 2023) |
- En la década de 1950, se declaró la guerra al cómic. Imprimirlos, publicarlos o venderlos podría acarrear multas o incluso penas de prisión. La gente temía que convirtieran a los niños en criminales empedernidos (Pessimists Archive, 2023). Hoy en día el éxito de taquilla de las películas de superhéroes provenientes del mundo del cómic han infundado de valentía y justicia a los niños del mundo más de lo que han hecho sus propias escuelas e iglesias. Un ejemplo: Bridger Walker, de 6 años, de Wyoming, salvó la vida de su hermana, de 4 años, del ataque de un perro y fue necesario ponerle 90 puntos de sutura en la cara. Él es un gran fan de los Avengers y al igual que el Capitán América estaba dispuesto a dar la vida por sus seres queridos.


8. Hubo un tiempo en que la gente pensaba que los juguetes mecánicos eran tan peligrosos para los niños cómo creen que lo son ahora los videojuegos. Un artículo de 1941 declaró: «los juguetes mecánicos demasiado elaborados para los más pequeños hacen que un niño sea menos ingenioso (…) No logran desarrollar su imaginación porque solo pueden usar esos juguetes de una manera (tedium, 2021)». Sin embargo, la historia fue diferente: el deseo de saber de qué está hecho un juguete, qué se supone que debe hacer y cómo lo hace, enseña muchas cosas a un niño y la historia está llena de ejemplos de personas que se inspiraron en sus juguetes. Hoy muchas de esas personas que jugaron videojuegos en los años 80 y 90 están diseñando las próximas generaciones de computadoras, ellos hacían mucho más que perseguir hongos en Mario Bros.
9. En 1982, el entonces Cirujano General de EUA, Dr. Everett Koop, advertía sobre los riesgos de los videojuegos para los jóvenes a su salud mental y física, aseguraba que tendría pruebas contundentes, con el paso del tiempo no surgieron dichas pruebas, más tarde le tocó retractarse, dijo a la prensa lo siguiente: «Mi comentario improvisado no fue parte de ningún comentario preparado. Nada en mis comentarios debe interpretarse como que los videojuegos son per se de naturaleza violenta o dañinos para los niños». Pero la leña al fuego ya había sido echada. (Pessimists Archive, 2023)

¡Perdemos habilidades debido a la tecnología!
Es una afirmación de los detractores de la tecnología. La tecnofobia seguramente existe desde que inventamos la rueda, pero citaremos dos ejemplos registrados en prensa. El primero del año 1850, un periódico en Wisconsin llamado el Heraldo del Evangelio cuyo artículo titula ‘Desventajas de la civilización’, dice así: “El hombre civilizado ha construido un carruaje, pero ha perdido el uso de sus pies. Está sostenido por muletas, pero pierde mucho músculo. Tiene un buen reloj de Ginebra, pero no tiene la habilidad de decir la hora por el sol”. El segundo, un reporte de prensa del Xenia Daily Gazette de Ohio en 1965, titulado “Las habilidades perdidas por la tecnología moderna” lamenta que las amas de casa ya no hacen chucrut desde cero, debido a que pueden obtenerlo como un producto más de la industria alimenticia. (Build For Tomorrow, 2020)
Cuando has crecido con las viejas formas de hacer las cosas, que son más difíciles de dominar, están probadas y tienen una historia para ti, es probable que las nuevas tecnologías te resulten fáciles, perezosas y hasta inferiores. Así lo acredita mi profesor de conducción, aduciendo que la caja mecánica es mucho mejor que la caja automática. Sin embargo, para mi madre conducir con caja mecánica es algo a lo que no quisiera tener que volver. Entonces cabe preguntarse ¿estamos realmente perdiendo habilidades o simplemente ya no necesitamos aprender eso? si tienes más de 40 años probablemente tengas la misma experiencia que los autores de esta obra, aprendimos cursiva en la escuela cuando éramos niños y, luego, básicamente nunca la usamos, como adultos probablemente no veas muchos problemas con que tu hijo no aprenda la letra cursiva, porque, francamente, ya la olvidaste. En la historia de la escritura son muchas las habilidades perdidas en razón de la época que nos toca vivir.

Cuesta cambiar lo viejo por lo nuevo
La taquigrafía es una habilidad que se remonta a los antiguos romanos y era la columna vertebral del mantenimiento de registros. Se enseñó en las escuelas hasta mediados del siglo XX. En los juzgados se mantuvo como herramienta principal de los registros hasta 1935. Dominick Tursi, historiador de taquigrafía, señaló que un suceso mundial cambió las cosas: el secuestro de bebés de Lindbergh. El mundo quería saber lo que estaba pasando en el juzgado; obviamente, no podían hacer mucho con la taquigrafía, por lo que necesitaban un texto mecanografiado. Para ese tiempo los avances ya existían: En 1837, Thomas Pittman introdujo un sistema fonético de escritura. Para finales de 1800 comenzaron a inventarse las máquinas de escribir. No importó que está tecnología ya existiera y fuese útil, hizo falta de la fuerza social por saber lo que obligó abandonar la anticuada taquigrafía en los tradicionales juzgados.
Lamentablemente, está historia es similar a lo que pasa hoy con el lápiz y el papel en la escuela mientras vivimos en la era de las computadoras. Los detractores aducen que escribir es mentalmente superior al teclado. Cabe recordar que el hecho de que una habilidad se desarrolle para adaptarse a una necesidad, no significa que la habilidad o la necesidad permanezcan estáticas para siempre. Las habilidades y las necesidades evolucionan juntas. Cuando requeríamos escribir a mano lo hicimos hasta alcanzar el máximo potencial, ese mundo ya no es necesario con los teclados y las tecnologías de la información digital. [¡Spoilers! en realidad nada se pierde, lo retomaremos en breve]. A lo largo de nuestra historia humana son muchas las habilidades que ayudaron a los individuos y a las sociedades a funcionar durante muchos años y luego fueron eliminadas por la tecnología. Nuestros antepasados se mantuvieron vivos con destrezas como encender fuego, construir un refugio, hacer ropa desde cero, herrería, fabricación de cuchillos y carpintería (Waldenlabs, 2016), pero hoy padres y madres se consideran capaces de cuidar a sus familias, sin siquiera saber producir mantequilla extrayendo la leche de su propia vaca o fabricando sus propios tenedores, como se hacía antes.
Nada se pierde con internet
Erróneamente los detractores de la tecnología arguyen que basta que una generación deje de practicar un conocimiento ancestral para que éste se pierda. La necesidad de comunicarnos es importante en nuestra sociedad, pero las habilidades y formas de hacerlo devendrán de la época que nos toque vivir. Empero, losaprendizajes y técnicas no se pierden, al menos no desde que existe internet, el lugar donde podemos conservar las lecciones en formato de textos, audio, video y a un clic de distancia. Le invitamos a buscar un curso gratuito de taquigrafía, encontrará muchos en internet.
¿Somos mentalmente más perezosos por usar tecnologías?
Algunos piensan que internet nos hace mentalmente más perezosos. En vez de resolver problemas por cuenta propia se dice que estamos subcontratando a una computadora. Si un chimpancé que no tiene acceso a los alimentos por sus propias manos usará una vara para alcanzar a las termitas ¿eso lo hace más perezoso o todolo contrario lo hace más astuto? ¿Realmente nos hemos vuelto más tontos por usar tecnologías, o hemos tomado una decisión lógica basada en nuestro entorno actual? Las nuevas generaciones han decidido desarrollar habilidades diferentes como usar eficientemente una computadora y las apps de sus celulares, que son herramientas impresionantes. Los detractores de la tecnología parecen preferir simplemente las habilidades antiguas que las nuevas.

¿Internet nos aísla o nos hace más sociables?
“Los medios a menudo informan de que un uso intensivo de internet aumenta el riesgo de enajenación, aislamiento, depresión o distanciamiento social. Sin embargo, los datos disponibles evidencian que, o bien no existe ninguna relación entre el uso de internet y la intensidad de la vida social, o bien ésta es positiva y de efecto acumulativo. Observamos que, en general, las personas más sociables son las que más utilizan internet. Y cuanto más usan internet los individuos, más aumentan su sociabilidad dentro y fuera de la red, su responsabilidad cívica y la intensidad de sus relaciones con familiares y amigos (Castells, BBVA, 2014)”.
En la imagen podemos ver a Knowdi, jugando Call of Duty, modalidad Warzone, con compañeros que tuvieron que cambiar de residencia, sea a otro departamento u otro país. El contacto y las amistades en un mundo global ya no se pierden tan fácil como antaño.

Como demuestran los datos de Castells y la anécdota mencionada, internet no aísla a las personas ni reduce su sociabilidad, sino que en realidad la aumenta. Así que deje a sus hijos jugar con su PS4.A los detractores de la tecnología hay que recordarles que ‘no todo lo natural es bueno ni todo lo artificial es malo’, solo basta con observar como la cultura introduce lentamente invenciones artificiales que a la larga forman parte de nuestro entorno, se vuelven omnipresentes y por tanto naturales. Piensen en la vestimenta, la rueda, el lenguaje (que tiene su propio circuito cerebral), la matemática, el romance, el arte, las religiones, la economía, la cama, el baño, el auto, la casa con cuartos individuales (impensable antes de la Revolución Industrial) y en hoy en día las TICS ¿acaso estas cosas existían cuando inició la era del homosapiens?
Son muchas las buenas razones para permitir a la niñez usar tecnologías
La tecnología es el mejor amigo del medioambiente
En las aulas del siglo XXI, los estudiantes pueden visitar una lejana excavación arqueológica, un famoso museo, parques nacionales o un hospital gracias a la realidad virtual y aumentada; reduciendo así la contaminación por movilización o la imposibilidad de ir por falta de recursos económicos. En instituciones académicas avanzadas las simulaciones y hologramas permiten a los futuros médicos hacer prácticas quirúrgicas sin necesidad de un cadáver. Hace ya un tiempo se aprende a pilotar un avión sin invertir en combustibles o accidentes innecesarios. En CuMeCo hemos evidenciado que al salir de las pedagogías de lápiz y papel e ingresar al mundo digital, las bolsas de basura por residuos de materiales escolares de nuestros talleres, es cero. Los ordenadores que usamos para nuestros experimentos con la niñez siguen vigentes desde su compra en 2020.
Con internet nuestra atención y memoria aumenta.
Con internet obtenemos mayor información sobre nuestros intereses. El experto en internet, Clay Shirky, explica que nadie puede concentrarse simultáneamente en todo; pero, podemos crear juntos una atención colectiva que posea un ancho de banda al que cualquiera, cuando lo necesite, pueda conectarse. Para Shirky, “la atención como la memoria o cualquier experiencia cognitiva puede ser considerada como una capacidad distribuida entre muchas personas lo que ahora es una tendencia al alza (Goleman,2015)”. La internet puede crear una prótesis mental que amplíe el rango de nuestra atención individual. Nuestra atención aumenta en la medida que lo hace el número de vínculos sociales que nos proporcionan información crucial.
Un tutor socrático las 24 horas del día
Sal Khan creador de KhanAcademy ha dado un gran salto al introducir una IA especializada en educación. Su propuesta es que cada estudiante tendrá acceso a un tutor personal y cada maestro recibirá un asistente inteligente. “Para decirlo sin rodeos, puede convertir a un estudiante promedio en uno excepcional. Puede convertir a un estudiante de bajo promedio en un estudiante de alto promedio (TED, 2023)”. La IA educativa no le dice la respuesta al estudiante, le ayuda a comprender su tarea y, es capaz de identificar el concepto erróneo en la mente del estudiante. La IA no le dice estás equivocado, sino que le pide al estudiante que le explique su razonamiento, dialoga con el estudiante.
La IA no escribe para ti, escribe contigo
El futuro de la escritura será una simbiosis entre humanos y máquinas. Los escritores proporcionarán ideas, luego actuarán como editores de los resultados de la IA. Cometa (niño, 12 años) contaba que una tarea de su escuela fue hacer un guión, pero él no recordaba cómo se hacen, ni sabía cómo empezar, se sentía bloqueado, pero recordó que en CuMeCo le expresamos que cuando tengas dudas habla con la IA. Cometa le contó a la IA que tenía que hacer un guion de un texto de AulaPlaneta, le dotó de información y le pidió que le ayudará hacer el guión con la información precisa. Con el resultado de la IA, Cometa entendió cómo hacer un guión, así que dedicó el resto del tiempo a volverlo más creativo y con su propio estilo. Al cabo de media hora había terminado la tarea. Ahora, imaginemos que un estudiante no tiene acceso a la IA en casa y en la escuela le han dicho que usarla está mal. Probablemente, intente llamar al profesor, pero imaginemos que éste no puede atender su solicitud. Tal vez, el estudiante intente buscar un libro de apoyo para redactar guiones, pero resulta que no lo entiende del todo. Así que decide llamar a su mejor amigo del curso, pero lamentablemente, éste tiene las mismas dudas. Impotente, decide esperar a que lleguen sus padres para pedirles ayuda. Cansados del trabajo sus padres le ayudan con enojo a resolver su tarea. Así habrá pasado una larga tarde intentando resolver una sola tarea escolar. Lo que podría generar estrés y desgano cuando enfrente tareas similares. Lo peor, recién acaba de empezar el año escolar.
Si te da vergüenza hablarlo con las personas, conversa con ChatGpt
Los estudiantes que usan la IA de KhanAcademy dicen: «es increíble poder afinar mis argumentos sin temor a ser juzgado. Me da mucha más confianza para entrar en clase y realmente participar (TED,2023)». En CuMeCo hemos hecho un experimento con la niñez y adolescencia, les hemos pedido que conversen con la IA temas que les causaría vergüenza abordar con adultos o profesores. En el experimento les indicamos una regla: ChatGpt proporciona un punto de vista científico y genérico, no explica la situación personal, sino que ofrece ideas para ayudarte a ver la situación desde diferentes puntos de vista. La conclusión: los adolescentes expresaron estar muy cómodos al hablar con la IA sobre cualquier tema de su vida adolescente, desde la música que escuchan, hacer nuevas amistades, aprender una lección de la escuela, el romance adolescente, comprender sus cuerpos, sentir emociones negativas por compañeras o compañeros. En una ocasión una estudiante preguntó a la IA ¿qué hago cuando veo al chico que me gusta? y según ella la respuesta de la IA fue muy positiva, le ayudó a canalizar sus emociones, expresarse correctamente cuando esté frente al chico que le gusta y sentirse más segura de sí misma.
“Lo esencial es invisible a los ojos”
Hemos atestiguado en esta nota los miedos irracionales a la tecnología. Hoy, las computadoras, los videojuegos y las redes sociales apenas son usadas por las academias anquilosadas en el papel y el lápiz. Este retraso puede ser significativo entre ser una persona competente y sofisticada en el siglo XXI o seguir viviendo en el siglo XVIII. Los estudios más serios dan la razón al impacto positivo de la tecnología en nuestras vidas. El psicólogo de la Universidad de Stetson, Christopher Ferguson, es claro al señalar que el ‘uso patológico de la tecnología no es causado por la tecnología, sino que, debido a que ese es el síntoma más visible, es comprensible que los padres, profesores y políticos piensen que si quitamos los videojuegos, internet, Facebook e Instagram de la educación, todo se resolverá (Reason, 2022)’.
Sin embargo, en el cuento de ‘El Principito’ de Antoine de Saint-Exupéry, en el capítulo 21, el zorro le revela un secreto al principito: ‘Solo con el corazón se puede ver bien; lo esencial es invisible a los ojos’. Esta frase subraya que las cosas más importantes no son visibles a simple vista; y es ahí, en el mundo interior al que no prestamos atención, donde se deben resolver los problemas sociales, cognitivos, emocionales y físicos de la niñez. En todo caso, internet puede ser nuestro más grande aliado para superarlos.

Referencias bibliográficas:
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